24 julio 2014

Celsius 232: altas temperaturas en Avilés

Del 30 de julio al 2 de agosto (acceso libre y gratuito) va a tener lugar en Avilés la II edición del Celsius 232 (nombre equivalente a la famosa temperatura: Farenheit 451). Es un festival que ya nació con fuerza y que parece que la mantiene. Su temas principales son fantasía, ciencia ficción y terror, pero que no se cierra a otras disciplinas o géneros. En esta edición se podrá disfrutar, entre muchos otros, de los siguientes autores: Espido Freire, Fernando Marías, Alba Quintas, José Carlos Somoza, David Lozano, Javier Ruescas o Patrick Rothfuss.

Este año, tiene un papel importante la literatura infantil. Va a haber múltiples presentaciones, sesiones de firmas y un repóker de damas de la LIJ: Ana Campoy, Mónica Rodríguez, Carlota Echevarría, Raquel Míguez y Sofía Rhei. Si no me pillase tan lejos, no me lo perdería.

18 julio 2014

Cadena de preguntas: Begoña Oro a Daniel Monedero


Este tema forma parte de Cadena de preguntas

Begoña Oro a Daniel Monedero

Dijo Rosa Regàs: “es imposible ser madre y escritora a la vez”. Tú acabas de ser padre: ¿es imposible ser padre y escritor a la vez? O, de forma más precisa, ¿crees que ser escritor de literatura infantil y padre simultáneamente es mejor, peor, indiferente o imposible?
Querida Señorita Oro, para comenzar respondiendo a su pregunta, le diré a todo que sí. No por un deseo enfermizo de asertividad, sino porque realmente creo que ser escritor de literatura infantil y padre simultáneamente es mejor, es peor, es indiferente, y es imposible.

Es mejor porque ahora veo la cara de un futuro lector todos los días, todas la horas y casi todos los minutos. Y eso ha hecho que cambie mi método de escritura radicalmente. Me explico. En estos momentos estoy en el proceso de corrección de una novela para niños. Y aunque es más literario escribir con un gato persa en las rodillas o con un perro Golden en los pies, yo escribo con mi hijo tumbado a mi lado en una alfombra azul. Es cierto que solo tiene cinco meses, pero yo confío ciegamente en su juicio como lector, y por eso cada día le leo uno de los capítulos de la novela que estoy corrigiendo. Hasta el momento las reacciones de mi hijo han sido, entre otras: Llorar, gritar, reír, regurgitar, patalear, babear y quedarse dormido. Y así, dependiendo de cada una de sus reacciones yo voy corrigiendo el texto en una dirección o en otra. Si se queda dormido, por poner un ejemplo, se que tengo que añadir algo de emoción a esa parte del texto. Si se ríe, veo que no voy por mal camino cuando se trata de un pasaje humorístico. Cuando regurgita, en cambio, todavía no sé qué me quiere decir o señalar o hacer notar. ¿Quizá que se trata de un texto de difícil digestión? No lo sé. Todavía estoy meditándolo.

Es peor porque ahora cuando las visitas llegan a casa ya no dicen: “Qué libro más bonito has escrito” sino “Qué hijo más bonito tienes”. Lo que me hace desear tener muchos hijos bonitos en lugar de escribir muchos libros bonitos. Y eso es peor para la literatura. Claro. Mucho peor. Dónde va a parar.

Es indiferente porque uno tiene que escribir siempre y como sea. Sirva una reveladora anécdota que contaba el escritor Andrés Trapiello en una entrevista para la revista Jot Down. Decía que un día se quejaba a su amigo Carlos Pujol de no tener tranquilidad para escribir, porque sus hijos pequeños no dejaban de hacer ruido, reclamar su atención e interrumpirlo. Y Carlos Pujol le vino a decir que si no era capaz de poder escribir con ruidos e interrupciones, debería dejar lo de ser escritor. Porque el escritor ha de escribir donde esté y como pueda.
Estoy totalmente de acuerdo con ello. A lo mejor ahí se esconde mi verdadera respuesta. Pero a lo mejor no. Nunca se sabe. Tampoco hay que olvidar que el escritor es un ser de excusas. No escribo porque no tengo tiempo, no escribo porque no tengo silencio suficiente, no escribo porque no tengo una casa en el mar, no escribo porque tengo un hijo, no escribo porque la CIA me persigue para matarme, etc… Si utilizásemos toda esa creatividad para fabular historias en lugar de para justificarnos quizá seríamos mejores escritores. Pero quizá no. Nunca se sabe.

Es imposible porque… ¿A eso respondí que sí en principio? Pues no. No es imposible. Es posible ser escritor de literatura infantil y tener un hijo. Incluso es posible ser escritor de literatura infantil y tener en casa una iguana o un cactus. Yo tengo tres. Lo que no sé si es posible es ser escritor de literatura infantil y tener en casa un elefante asiático o un tigre de bengala. Pero algún día lo probaré y entonces tendré la respuesta exacta.

Espero, admirada Señorita Oro, haber respondido a su pregunta. Y espero también que un día me invite a un Gin Fizz o a un viaje en Transiberiano. Eso.

Daniel Monedero a Carmen Pacheco

Carmen, antes de formular mi pregunta, te diré que yo además de escribir libros para niños me dedico a escribir guiones para series de televisión desde que comencé a trabajar en la serie Siete Vidas. Y siempre tengo que responder a la pregunta de qué diferencias hay entre una labor y la otra. Así que había pensado plantearte a ti la misma cuestión respecto a tus libros para niños y tus guiones para cómic o tus artículos. Pero como a mí me da rabia que me hagan esa pregunta he decidido hacerte otra. Ahí va. Hace ya veinte años un escritor español decía que muchos de sus colegas de profesión en España escribían como si no existiera la televisión, ¿tú crees que se pueden escribir libros para el público infantil y juvenil hoy en día como si no existiera Internet? Y acotando un poco más la pregunta, ¿crees que de algún modo Google, Facebook, Twitter, Instagram, etc... debería modificar la manera de narrar historias para niños y jóvenes? ¿Tú lo tienes en cuenta? ¿Sí? ¿No? ¿Quizás? ¿Depende? ¿Qué piensas al respecto?

16 julio 2014

Solos. Tomo 1 (Cómic). Fabien Vehlmann y Bruno Gazzotti

«Una tarde de verano.Una ciudad sigue vibrando con la actividad del final del día. Pero la gente ya empieza a volver a sus casas. Se relajan y dejan de pensar en el trabajo. Hacen bien. Porque mañana todo eso habrá desaparecido.»

Sin que sepamos el motivo, la ciudad amanece completamente vacía. Ha desaparecido todo el mundo, salvo cinco chicos: Dodji, Leila, Terry, Celia e Iván, que se van encontrando en unas calles inquietantes. Tendrán que aprender que las reglas han cambiado y que, aunque se acaben de conocer, se necesitan más que si fuesen una familia. Las aventuras, los momentos de tensión y hasta de miedo, no tardarán en llegar: animales salvajes sueltos, un aterrador personaje cubierto de cuchillos y finalmente lo que parece el final de sus preocupaciones: un parque de atracciones en el que muchos más niños han llegado de la mano de Saúl, el jefe del clan del tiburón, y viven con cierta seguridad y felicidad. Apariencias...

Solos es un pedazo de cómic. La historia, que recuerda a otras tanto de la literatura como del cine, está muy bien contada, y en estos casos contada significa escrita (Velhann) y dibujada (Gazzotti), pero no por separado, sino de forma indisoluble. Los personajes transmiten muy bien su esencia. Comprendes sus reacciones, sientes sus miedos y entiendes que alguno de ellos sea el líder, por sus heroicas actuaciones, aunque se haya visto obligado a realizarlas por mero instinto de supervivencia.

Solos - Tomo 1 recoge en un solo volumen, con tapa dura, las tres primeras entregas del original Seuls de una serie que creo que en Francia va por el octavo y que ha tenido gran éxito. Hay que indicar que no se trata de un cómic infantil. Tanto por el lenguaje como por la complejidad de algunos argumentos, estamos ante un cómic juvenil y adulto. Dibbuks lleva diez años nutriendo a los lectores de buenos cómics. Solos es una muestra perfecta.

11 julio 2014

No siempre serán así las ventas ni las opiniones de la LIJ

Ilustración de Pawła Kuczyńskiego
El sector de la literatura infantil y juvenil, que presumía de haber aguantado el tirón mucho mejor que el de la de adultos, también nota los efectos de la crisis. Lo analizan en el artículo de El País El libro infantil y juvenil sigue su caída en ventas. Los datos son del informe de Hábitos de lectura y compra de libros en España 2012. No podía ser de otra forma. No deberíamos sorprendernos de que con una crisis tan larga como la que nos están imponiendo, en la que la gente se priva de viajes, de ropa que no sea necesaria, de salir a menudo a tomar algo, cuando no de cosas mucho más esenciales, no se resienta también la venta de libros.

De todas formas, también tengo la sensación de que, al margen de que las cifran avalen el artículo, este tipo de opiniones son las mismas que cuando salga un libro o saga que vuelva a partir la pana (que saldrá), inmediatamente hablarán de una nueva época dorada de la LIJ. He leído artículos y reflexiones en ese sentido en numerosas ocasiones: suelen ser bastante simplistas y analizan la realidad a golpe de fenómeno literario. Que a un hotel le vaya muy bien, por poner un ejemplo, no quiere decir que la hostelería al completo esté fenomenal, y viceversa. En la actualidad coincide crisis económica con ausencia de algún libro megasuperventas, lo cual hace que todas las opiniones parezcan bien fundadas y apunten hacia la misma dirección. No siempre ha sido así y no siempre lo será.

07 julio 2014

Maite Carranza, Premio Cervantes Chico 2014

Maite Carranza ha obtenido el Premio Cervantes Chico 2014 de literatura infantil y juvenil de Alcalá de Henares. Maite Carranza es la autora de La Guerra de las Brujas o Palabras Envenenadas, que mereció el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil de 2011.

La concesión del Premio de Literatura Infantil y Juvenil Cervantes Chico comenzó en 1992, se interrumpió su entrega en 1999 y se recuperó en 2004. El plantel de galardonados hasta el momento es de auténtico renombre:


Juan Muñoz (1992)
Montserrat del Amo (1993)
Gloria Fuertes (1995)
Concha López Narváez (1996)
Joan Manuel Gisbert (1997)
Martín Casariego (1998)
Elvira Lindo (1999)
Santiago García-Clairac (2004)
Marinella Terzi (2005)
Ricardo Gómez (2006)
María Menéndez-Ponte (2007)
Alfredo Gómez Cerdá (2008)
Pilar Mateos (2009)
Fernando Lalana (2010)
Laura Gallego (2011)
Jordi Sierra i Fabra (2012)
Blue Jeans (2013)
Maite Carranza (2014)

01 julio 2014

V Premio Ciudad de Málaga: El club de los bichos, de Laida Martínez

La escritora Laida Martínez Navarro (Bilbao, 1965) ha sido la ganadora del V Premio de Literatura Infantil “Ciudad de Málaga” con la obra El club de los bichos. La participación de este año ha sido la más numerosa de todas las ediciones celebradas: se han presentado un total de 149 originales. El premio, que convoca el Área de Educación del Ayuntamiento de Málaga, está dotado con 6.000 euros y su publicación tendrá lugar a finales de año.

El jurado ha tenido un recuerdo especial para la presidenta de los dos primeros jurados de este premio: Ana María Matute.

La autora ganadora, Laida Martínez, nació en Bilbao en 1965. Es Licenciada en Psicología y ha obtenido numerosos premios literarios. En el año 2002 ganó el Premio Lazarillo con la obra de literatura infantil Max, escrita originalmente en euskera y publicada posteriormente por la editorial Edelvives bajo el título Los líos de Max.

Leer noticia completa en el blog de Anaya.